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4.5
Llegué a este libro por recomendación del fisioterapeuta Roberto Junquera según su video publicado en su canal de YouTube FisioOnline llamado "Alimentación, nutrición y limpieza para disfunción de Hígado y Vesícula biliar". El método de limpieza propuesto en el video se basa en el método de Andreas Moritz, el que se revisa en detalle en este libro.Me llamó la atención el método y sus potenciales resultados ya que, por medio de la limpieza del hígado se podrían solucionar indirectamente algunos otros problemas relacionados con dolores de espalda y problemas a la piel, entre otros, que, sin ser urgentes en mi caso, representaban una opción real de recuperación con un impacto supuestamente menor.Opté por llevar a cabo el método al pie de la letra durante un período libre de trabajo comenzando el 13/may/23 para rematar con el día de limpieza el día 18/may/23. Durante el periodo de preparación me dediqué a investigar potenciales riesgos relacionados con la ingesta de Sales de Epsom y también riesgos derivados de la hidroterapia de colon, propuesta por el Autor tanto antes como después de la limpieza. En mi búsqueda confirmé el uso de las sales como laxante y respecto de la hidroterapia de colon encontré relativo consenso en que su uso no estaría justificado dado que el colon tendría sus propios mecanismos de limpieza, por lo que no era recomendado por la medicina tradicional.Aún así decidí seguir adelante con el proceso y llevé a cabo la limpieza de colon previa el mismo día 18/may/23. Cabe hacer la aclaración de que, hace 10 años me realicé una apendicectomía y que durante años he presentado algunos síntomas relacionados con colon irritable como hinchazón y reacción a algunos alimentos, pero nunca nada que me haya llevado a una instancia aguda o de emergencia relacionada con el colon.La limpieza de colon se llevó a cabo sin dolores de ningún tipo y con esto ya estaba preparado para iniciar la limpieza de hígado durante la noche.Seguí las instrucciones al pie de la letra en cuanto a las horas, cantidades de Sales a ingerir. El primer vaso de Sales no produjo nada, pero desde el segundo empecé a experimentar movimientos intestinales y luego diarrea, tal cual anticipaba el libro, pero aún sin cálculos en las deposiciones. Luego vino la mezcla de jugo de pomelo y aceite, y tras este logré dormir alrededor de 2 horas para luego ir al baño, pero aún sin cálculos en las deposiciones. Fue luego del tercer vaso de Sales, a la mañana siguiente, qué logre ver cálculos, de varios tamaños, todos en tonalidades de verde acompañados por espuma blanca, todo según había indicado el libro. Antes y después del cuarto vaso de Sales seguí yendo al baño con resultados similares, todo sin problemas ni dolores, pero sí sintiéndome algo débil, qué después comprendí que era por la nula ingesta de alimentos y la deshidratación (de la que no se habla en el libro).Durante el resto del día fui incorporando alimentos de forma progresiva y de a poco sintiéndome mejor.En mi mente tenía presente la necesidad de realizarme la limpieza de colon posterior, pero a la mañana siguiente una leve molestia a nivel de colon descendente (del lado de mi mano izquierda) vino a cambiar los planes. Esta molestia fue aumentando en forma progresiva su intensidad a eso del medio día, y ya después de almuerzo, al mismo tiempo que sentía ganas de evacuar, sentía hitos de dolor agudo. Tras evacuar, si bien el dolor bajó, empecé a sentir cierta sensibilidad en esa misma zona por el solo hecho de caminar, momento en el que decidí ir a urgencia.La doctora de urgencia me revisó haciendo presión en algunas zonas del colon, y tras confirmar un dolor localizado solicitó un TAC (tomografía axial computarizada, también llamada Scanner) de abdomen y pelvis. El resultado fue que tenía Diverticulitis por lo que me recetó analgésicos durante 3 días y antibióticos durante 7 días.Durante los días posteriores me informé sobre este diagnóstico, entendiendo que los divertículos son sacos que, por lo general, aparecen en el colon descendente y sigmoide con mayor probabilidad desde los 40 años en adelante. Uno puede vivir con divertículos sin tener ningún síntoma durante su vida, pero puede haber un hito desencadenante que haga que uno o varios se inflamen, resultando en una Diverticulitis. En mi caso, y tras haber revisado mi situación con un médico internista y otro gastroenterólogo, está que el hecho desencadenante fue la limpieza realizada, y puntualmente el lavado de Colon con mayor probabilidad ya que, como me explicaban, en este el colon se somete a distensiones por fuera de lo normal, que podrían haber llevado a la inflamación que tuve, lo que lleva a deducir que el haberme realizado el lavado de Colon posterior a la limpieza de hígado hubiese sido perjudicial en mi caso.Sí el lector está pensando en realizar la limpieza, a la luz de los antecedentes, le sugiero hacerse un juicio del estado de su colon, idealmente consultar con un especialista de forma previa.
